El texto propuesto de Javier Darío Restrepo, síntesis
del taller de ética periodística, dictado para la fundación Nuevo periodismo
Iberoamericano (FNPI), presenta como objetivo principal exponer el dilema que
tiene el periodista frente al compromiso con la verdad.
Para desarrollar lo anterior, Restrepo aborda
elementos claves que debe asumir el periodista para lograr la veracidad de la
información. Primeramente, expone el proceso de recolección de datos, el cual
debe ser riguroso, teniendo en cuenta que la información no puede provenir de
una sola fuente, es fundamental conocer diferentes versiones del hecho. Al
ampliar el campo del mismo, identificar su contexto, sus antecedentes y
consecuencias, la información será más precisa.
Cómo consecuencia de esto, el periodista va
descubriendo el valor universal de la
verdad. Allí desarrolla un sentido de responsabilidad y a la vez de humildad,
ya que no sólo es dar a conocer el hecho, es necesario hacer que se comprenda,
pues estaría incompleto.
Por último,
Restrepo, cita dos conceptos claves: objetividad y credibilidad. Parafraseando
a Kapuscinski, la objetividad en su sentido literal, no es posible abordarla;
el periodismo no es imparcial y está construido por seres que sienten y se
vinculan, y es en éste punto, donde juega la credibilidad del periodista. Ésta
es entendida aquí como la habilidad de hacerse creer, el arte de “caminar en la
cuerda floja” y demostrarle al lector que se está de parte de él, sin caer en
la subjetividad.
El documento concluye con un ejercicio, donde los
participantes al taller, debían escoger una frase, de tres opciones dadas.
“Mi deber de periodista es con la verdad. Lo demás es
secundario” Considero que ésta frase resume la intención comunicativa del texto
y a la vez es la razón de ser del periodista; es éste compromiso el que
direcciona el escribir y el papel fundamental de quien ha escogido dicha labor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario